viernes, 24 de diciembre de 2010

Escuelas nómadas combaten el analfabetismo en las selvas de Indonesia

La lucha contra el analfabetismo libra una nueva batalla en las selvas de Indonesia, donde una ONG integra profesores en tribus nómadas para enseñar a los niños los rudimentos básicos necesarios en el mundo moderno sin descuidar sus costumbres.


Descalzo y en cuclillas, el pequeño Penguwar escribe lentamente en una rústica pizarra, apoyado sobre un tronco caído, en la linde del pequeño claro del bosque donde acampa su comunidad, de la minoría rimba, en la isla de Sumatra. Junto a él, ni más alumnos, ni pupitres ni paredes, tan sólo su profesora, que le observa con atención, y la frondosa selva tropical como telón de fondo. "No tenemos horarios, ni compromisos ni niveles. Tampoco uniformes. Ni siquiera edificios. Nuestro sistema educativo es completamente distinto al de los colegios normales", explica la directora de comunicación de la ONG Sokola, Aditya Dipta Anindita.Los profesores se integran en la vida diaria de las comunidades tradicionales, les siguen a través de la selva, aprenden su idioma y su cultura y están permanente disponibles para que sus alumnos, cuando quieran y puedan, se acerquen a aprender con ellos. Según Anindita, sólo así, adaptándose a las costumbres locales, se puede acceder con éxito a los más de 40 millones de personas que viven según usos ancestrales en Indonesia, y atacar los últimos reductos de analfabetismo del país, donde un 8 % de la población no sabe leer y escribir.

Terra Perú / EFE
 http://www.terra.com.pe/buenas-noticias/noticias/acc1316/escuelas-nomadas-combaten-analfabetismo-selvas-indonesia.html

martes, 21 de diciembre de 2010

ANALFABETISMO: BUENAS Y MALAS NOTICIAS (David Boaz)

En su informe "El estado de los niños del mundo en 1999", la UNICEF advierte que "casi mil millones de personas, dos terceras partes de ellas mujeres, entrarán al siglo XXI sin poder leer un libro o escribir su nombre".
UNICEF, la agencia de protección de los niños de las Naciones Unidas, informa que los analfabetos "viven una pobreza más desesperada y peor salud" que quienes saben leer y escribir. Esa terrible estadística, mil millones de analfabetos, generó titulares alarmantes en los principales periódicos del mundo.
La indigencia en los países pobres es algo que nos debe preocupar a todos.  Pero como suele suceder, hay más por detrás de estas terribles estadística de lo que UNICEF nos dice. Considere tres elementos.
Los periodistas saben que las malas noticias venden periódicos y mil millones de analfabetos, casi 16% de la población del mundo, es verdaderamente una mala noticia.
Pero la verdadera cifra de UNICEF es 855 millones, lo cual no apareció en la prensa. Sigue siendo una cifra inmensa, pero es 15% menos que mil millones.
Más importante aún, UNICEF no dice si la tendencia del analfabetismo es positiva o negativa, aunque insiste -con pocas pruebas- que el analfabetismo crecerá en el siglo XXI. Si así fuese, resultaría ser un sorprendente vuelco sobre la experiencia del siglo XX.
Según el organismo coligado de UNICEF, la UNESCO, la tasa de analfabetismo en el mundo fue de 30,5% en 1980 y 22,6% en 1995. Es más, la tasa mundial de analfabetismo para los adultos nacidos antes de 1926 era cerca de 75%, reduciéndose a 52% entre aquellos nacidos alrededor de 1948 y 20% entre los nacidos en 1970. Esto indica un notable progreso, que debemos mantener en mente cuando leemos el informe de UNICEF.
Con toda razón, UNICEF mantiene que debemos preocuparnos por el analfabetismo, no sólo por el hecho en sí, sino porque contribuye a la pobreza. "Sin educación, la gente no puede trabajar productivamente, ocuparse de su salud, mantener y proteger tanto a sí mismo como a su familia, o tener una vida enriquecida por la cultura".
Es cierto. Pero la relación entre la educación y el crecimiento económico es complicada. Las capitales del Africa están repletas de gente con títulos universitarios, pero que producen muy poco en sus economías corruptas y estatistas. Europa Occidental, América del Norte y Hong Kong experimentaron un rápido crecimiento económico antes de la diseminación de la educación.  La gente próspera se puede dar el lujo de darle una buena educación a sus hijos.
Los países comunistas parecen lograr buenos índices respecto a enseñar a la gente a leer y escribir, quizá para que absorban la propaganda del partido. Pero sus elevadas tasas de alfabetismo evidentemente que no lograron eliminar la horrible pobreza de los países comunistas.
Por el contrario, la relación entre la libertad económica y la prosperidad es directa. En prácticamente todos los casos, tanto históricos como contemporáneos, mayor libertad económica conduce a mayor crecimiento. En "Libertad económica en el mundo", publicado por Fraser Institute en Vancouver, los economistas James Gwartney y Robert Lawson clasifican 115 países según 17 componentes de libertad económica: moneda estable, libre comercio, derechos de propiedad, bajos impuestos, no reclutamiento militar, seguridad jurídica, etc. Los autores encuentran una estrecha correlación entre libertad económica y PBI per capita. Los países en el tope, es decir, los 23 países con mayor libertad económica, tienen ingresos per capita de 14.829 dólares al año. Aquellos en el segundo quintil tienen ingresos de 12.369 dólares. Después hay una caída rápida: tercer quintil 6.385 dólares; cuarto quintil, 3.057 dólares y en los países menos libres del quinto quintil, el ingreso promedio es de 2,541 dólares al año.
La gran preocupación de UNICEF es sobre este último grupo. Y si quienes trabajan en UNICEF de verdad quieren mejorar las vidas de los niños más pobres en el siglo XXI, deben insistir que esas naciones den libertad económica a sus ciudadanos.
La buena noticia es que los índices de alfabetismo siguen mejorando.

viernes, 17 de diciembre de 2010

El analfabetismo en el mundo

El grave problema del analfabetismo en los países desarrollados y subdesarrollados sigue siendo uno de los temas prioritarios a solucionar desde que se analizara profundamente en la Conferencia Mundial de Educación para Todos, celebrada en 1990 en Jomtiem (Tailandia). En esta cita a la que asistieron representantes de países de todo el mundo se llegó al consenso de que la alfabetización es uno de los factores clave para resolver muchos de los problemas más acuciantes en todas las sociedades, que la realización plena del ser humano sólo se logra a través de la educación y que promover la educación es fundamental para el desarrollo de las naciones. No en vano constituye una herramienta muy eficaz para combatir la pobreza y la desigualdad, mejorar los niveles de salud y bienestar social, y sentar las bases para un crecimiento económico sostenido y una democracia duradera. Razón por la que la educación se incluyó entre los ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio de las Naciones Unidas, fijándose el año 2015 como fecha límite para alcanzar un 100% de educación primaria para todos los niños del mundo. Como consecuencia, a finales del año 2001 la Asamblea General de la ONU proclamó al período 2003-2012 como el 'Decenio de las Naciones Unidas de la Alfabetización', ratificando así el objetivo fijado en el Foro de Educación Mundial de Dakar de educación primaria efectiva para el año 2015.
Pero la situación más alarmante se deriva del retroceso que ha experimentado el proceso de alfabetización en el mundo; mientras que en la mitad del siglo XX se habían logrado grandes avances en términos de la erradicación de analfabetismo -objetivo largamente declarado por la comunidad internacional- actualmente parece que esta tendencia está cambiando y se teme que hasta podrían perderse los logros obtenidos en el pasado ante el recorte de recursos para la educación en muchos países castigados por crisis económicas. En estos momentos, más de un 15% de la población mundial es analfabeta y por lo tanto excluida de cualquier posibilidad de participar activamente en la sociedad del conocimiento. Son pueblos enteros los que sufren las consecuencias de la imposibilidad de acceder a la herramienta más básica para comunicarse en la sociedad moderna. Se vulnera así el derecho de la educación básica, un derecho formalmente reconocido desde su consagración hace 50 años en la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

viernes, 3 de diciembre de 2010

Deserción escolar y la falta de inversión en educación (nueva generacion)

“Enseñar no es una función vital, porque no tiene el fin en sí misma; la función vital es aprender”.

La educación es una de las herramientas fundamentales para el desarrollo de las capacidades en la vida de todo ser humano
Invertir en la educación es también invertir en un progreso social comunitario que ayude al desarrollo económico de la nación. Algunas investigaciones recientes exponen que el capital extranjero de inversionistas trata de obtener beneficios de una fuerza laboral capacitada. El problema no sólo es el poco presupuesto asignado para educación, sino que tampoco existen estrategias de seguimiento a estudiantes para evitar que abandonen las aulas de clases, a pesar que el año pasado se aprobó la Ley General de Educación que supone una amplia inversión en educación.

Más de 121 millones de niños y niñas en el mundo, en edad de cursar estudios primarios, están descolarizados. Todos ellos y ellas están privados de su derecho a la educación debido a la pobreza, la falta de oportunidades, o ya sea porque los escasos recursos nacionales impiden contar con instalaciones escolares adecuadas, o bien la corrupción ha privado del derecho a la educación a la niñez y a la adolescencia.Uno de los objetivos del Milenio es que la niñez y la adolescencia alcancen el nivel de escolarización mínimo para brindarles algunas de las herramientas y logren desarrollarlas a medida que evolucionen....“Lo que no le demos a nuestros niños hoy no lo tendrán más adelante, se habrá perdido para siempre.” La primicia de que sólo el pueblo salva al pueblo deberá ser entones una de nuestras iniciativas al empezar a reclamar nuestros derechos y deberes establecidos en las leyes de nuestra querida Nicaragua. Pero no es suficiente con reclamarlos, sino también velar para que sean cumplidos.

*El autor es estudiante de comunicación social de la UCA.

nerygarca@yahoo.es

¿ESTAMOS A TIEMPO? ¿PODEMOS HACER ALGO?....

Viendo estas imágenes me pregunto si podremos salvarnos...... me pregunto quienes fueron los culpables.... me pregunto si queda algo despues de la miseria.... ???.... y me lleno de preguntas.... y me siento impotente.... y por mas que quiera, intente, haga.... siento que esto se nos va de las manos....

Para reflexionar

El mundo en miniatura

Si pudiésemos reducir la población de la Tierra a una pequeña aldea de exactamente 100 habitantes, manteniendo las proporciones existentes en la actualidad, sería algo como esto:
  • Habría: 57 asiáticos, 21 europeos, 4 personas del hemisferio oeste (tanto norte como sur) y 8 africanos.
  • 52 serían mujeres, 48 hombres, 70 no serían blancos, 30 serían blancos, 70 no cristianos, 30 cristianos, 89 heterosexuales, 11 homosexuales.
  • 6 personas poseerían el 59% de la riqueza de toda la aldea y los 6 (¡sí, 6 de 6!) serían norteamericanos. De las 100 personas, 80 vivirían en condiciones infrahumanas.
  • 70 serían incapaces de leer, 50 sufrirían de malnutrición. 1 persona estaría a punto de morir, 1 bebé estaría a punto de nacer. Sólo 1 (¡sí, sólo 1!) tendría educación universitaria.
  • En esta aldea habría 1 persona con ordenador.

Al analizar nuestro mundo desde esta perspectiva tan comprimida es cuando se hace más apremiante la necesidad de aceptación, entendimiento y educación.
Ahora reflexiona… Si te has levantado esta mañana con más salud que enfermedad, entonces eres más afortunado que los millones de personas que no sobrevivirán esta semana.
Si nunca has experimentado los peligros de la guerra, la soledad de estar encarcelado, la agonía de ser torturado o las punzadas de la inanición, entonces estás por delante de 500 millones de personas.
Si puedes acudir a la iglesia sin temor a ser humillado, arrestado, torturado o muerto… entonces eres más afortunado que 3.000 millones (3.000.000.000) de personas en el mundo.
Si tienes comida en la nevera, ropa en el armario, un techo sobre tu cabeza y un lugar donde dormir, eres más rico que el 75% de la población mundial.
Si guardas dinero en el banco, en tu cartera y tienes algunas monedas en la mesita… ya estás entre el 8% más rico de este mundo.
Si tus padres aún viven… eres una persona MUY rara.
Si puedes leer esta entrada, eres mucho más afortunado que los más de 2.000.000.000 de personas en este mundo que no pueden leer.
 

miércoles, 1 de diciembre de 2010

LA POBREZA Y EL ANALFABETISMO DOS CARAS DE LA MISMA MONEDA

EL SIGUIENTE TEXTO ESTÁ COGIDO DE EL BLOG "LA INDISCRETA", REALIZADO EN PERU.
"La pobreza y el analfabetismo son dos lastres que hacen, en consecuencia, imposible que se adelante opiniones respecto al desarrollo integral del país.Quienes viven en la miseria, son los mismos que carecen de la educación básica.
Y así se mantienen, porque contra lo que pueda declarar con descaro quien ejerce o haya ejercitado el poder político, poco o nada se ha hecho en favor de esos olvidados.

No tienen fuerza para trabajar porque nacen , lamentablemente, frágiles y sin salud, no tienen voluntad para el estudio, porque son débiles.
Así, a mayores niveles de educación hay menor proporción de pobres.Los datos estadísticos indican que el 91 por ciento de personas con educación universitaria superan con facilidad las vallas de la pobreza y, en contraste, tenemos un 37. 4 por ciento de analfabetos que viven en medio de la pobreza y otro 27. 8 por ciento carece de lo más elemental para sus subsistencia. Están en ese vergonzante rubro de la extrema pobreza.Los números no mienten. Por eso también se puede saber que entre las personas con educación superior universitaria, igualmente hay gente pobre.Un 7 por ciento se encuentra en tal situación y un 2 por ciento en la extrema pobreza."

Banquete del Hambre

EL ANALFABETISMO EN EL MUNDO

Según el informe anual de la UNESCO, en ocasión del Día Internacional de la Alfabetización, se estima en 500 millones el número de analfabetos en el mundo. La cantidad indicada se refiere a la población adulta y, si bien la cifra es abrumadora en sí misma, en términos relativos marca un progreso apreciable. En efecto, aunque la población mundial ha crecido un 50% en los últimos veinte años, los iletrados actuales constituyen un número sensiblemente menor que las proyecciones formuladas en la década del 80 en las cuales se calculaba que serían 942 millones al final del siglo. Debe inferirse entonces que las campañas promovidas para extender la alfabetización han alcanzado un rendimiento alentador.
Un aspecto muy injusto que revelan las estadísticas es que la mayor proporción de analfabetos es femenina. Así, entre los hombres adultos, la relación es 1 cada 5; entre la mujeres es 1 cada 3. En esto han jugado su parte los prejuicios culturales muy arraigados y determinantes.
En el mundo existen más de 700 millones de personas que no saben leer ni escribir y esta cifra puede aumentar .
En efecto, el problema del analfabetismo puede agravarse en lugar de mejorar si, al incrementarse la población de un Estado no aumenta también, y de forma proporcional, el número de escuelas y maestros.
Incluso podría darse el caso de que los presupuestos destinados a enseñanzas primarias, crecieron en cifras absolutas y , en cambio, el número de analfabetos aumentará.

HACIA UNA EDUCACIÓN GLOBAL

Desigualdad ampliada y creciente, descentralización autoritaria e ingobernabilidad se combinan produciendo cambios profundos que afectará la educación de varias generaciones. No se trata solo de que menos niños concurran a la escuela o tengan acceso a la universidad sino que se está produciendo un cambio estructural , se está pasando de un sistema que tendía a la incorporación creciente de diversos sectores sociales a uno tiende a la profundización de la desigualdad.